Actualmente no se concibe un Smartphone que no contenga aplicaciones para satisfacer cualquier tipo de necesidad. Se pueden encontrar desde apps para hacer transferencias bancarias hasta aplicaciones que te enseñan paso a paso cómo atarte la corbata. Las aplicaciones móviles forman parte de la rutina habitual de un gran número de personas pero… ¿desde cuándo están en el mundo?
En los 90
A finales de los 90 ya se encontraba aplicaciones que cumplían las funcionalidades básicas, es el caso de la agenda o los juegos de arcade. Al entrar en el nuevo milenio sufrieron una gran evolución la cual fue impulsada por el desarrollo de la tecnología Wap y la tecnología Edge. Gracias a dicha tecnología se aumentó la velocidad de la transmisión de datos pudiendo ofrecer mayores servicios multimedia.
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El momento de luz
Pero no fue hasta 2007 cuando alcanzaron su momento álgido con la aparición del iPhone de Apple que ofrecía una estrategia totalmente diferente a lo anterior visto. El propio teléfono recogería las aplicaciones desarrolladas y las ofrecería a través de su AppStore. Este fue el inicio de lo que conocemos actualmente como aplicaciones móviles.
La actualidad y los Smartphone
Hoy en día, el Smartphone cuenta ya por defecto con una serie de aplicaciones que le reportan un valor añadido. El desarrollo de aplicaciones móviles ha crecido de tal manera que es complicado que no se encuentre una aplicación para prácticamente todo. Las empresas y organismos públicos han descubierto la importancia que tiene estar disponibles para sus usuarios vía apps. En cuanto a los sistemas operativos, cada uno tiene su propia aplicación que le permite al interesado navegar y descargar aplicaciones publicadas por los desarrolladores externos, los cuales recibirá una retribución por cada descarga realizada.
¿Qué pasará?
De cara al futuro ¿quién no se ha preguntado cuál será el próximo avance en el ámbito de las aplicaciones? El presente lo sabemos; vivimos sumergido en él. Pero el futuro seguirá siendo ese gran interrogante para todos aquellos amantes de la tecnología. Por ahora, sólo queda esperar al siguiente paso de los grandes inventores.